MASOQUISMO VIRTUAL

La incorporación a nuestras vidas cotidianas de las “redes sociales”, ha provocado un gran asombro. Además ha sido catalogado como un fenómeno debido a la capacidad de expansión de dichos sitios, y no es para menos. Gracias a que se maneja una cantidad de información valiosa, interesante y en cantidades asombrosas que provoca al cibernauta una cierta atracción e inclinación a dichas páginas de internet y por si fuera poco es en tiempo real.

Las nuevas webs “sociales” manejan un perfil de cada persona que entra a estos lugares, también se pueden ver fotos, videos, status civil y hasta edad de la persona, es decir toda una serie de datos que solo se comparte con los amigos, la novia o a la gente que te importa, la cual en un panorama normal, la pondrías al tanto hasta que te vuelves ha encontrar con dicha o dichas personas, pero estos net-working han ayudado a que estés en contacto en tiempo real.

El problema no radica en darle click a estas nuevas formas de relaciones virtuales. Si no el manejo que le danos. Por ejemplo, cuando truenas con tu novi@ y estás al pendiente de su perfil para ver que está haciendo con su vida y que está hace de nuevo esa personita y “te atormentas” cuando cambia su status social o cuando ves una foto de ella (el) con otro (a) o cuando sale en un video comprometedor o cuando la postean o simplemente porque cualquier otro cabrón (o cabrona) le puso TQM o le puso TE KIERO –con “k”, que alguien me explique- . Total, nos hacemos un “haraquiri” mental y no la pasamos sufriendo mientras vemos el perfil del ex.

Curiosamente esta situación provoca solamente una cosa; UN MASOQUISMO VIRTUAL. Situación que se puede evitar simplemente eliminando a esa persona de tus contactos. Digo, si te causa revuelo en las enaguas o los chones para que moverle. Mejor erradica el problema de raíz y mándalo a volar como se debe y en todos los sentidos y hasta en el feisbuk. Porque hoy en día si te borran del feisbuk es la muerte.

Bueno independientemente de la masiva virtualidad de las redes sociales y de su excesiva corriente de información, debemos tener una cosa en claro, tomar una decisión es siempre el paso a una vida mejor. Entonces decide entre ¿sufrir o ser feliz virtualmente?